Una de las especies de reptiles más raras y desconocidas de Aragon es la culebrilla ciega (Blanus cinereus), animal que tiene el aspecto de ser una gran lombriz de tierra, inofensiva, menor de 30 centímetros, rosada, con la cabeza pequeña, sin orificios para los oídos y con los ojos reducidos a un par de puntitos azulados.
Hoy se sabe que falta en el toda la mitad norte de Aragón, y se han recogido observaciones puntuales en La Almunia, Ricla, Villanueva de Huerva, alrededores de Zaragoza ciudad, Santa Fe, Cuarte… y Gallocanta.
Aquí van algunas claves más sobre esta especie:
· Es una especie endémica de la Península Ibérica. Se distribuye por todo el centro y sur de España, estando completamente ausente en el norte y noreste peninsular. La provincia de Zaragoza y el sur de Navarra constituyen los límites más norteños para esta especie.
· La principal amenaza para este reptil parece provenir de la urbanización, que provoca la fragmentación de los hábitats donde se encuentra.
· A nivel de toda España, donde la especie cuenta con una mayor distribución, no parece tratarse de una especie seriamente amenazada. Sus hábitos subterráneos favorecen una mejor protección.
· Es una especie termófila que gusta de zonas cálidas con cierta humedad. Tiene hábitos subterráneos y elige suelos arenosos fácilmente excavables. Evita los terrenos con alta proporción de arcilla. Vive en ecosistemas mediterráneos compuestos por bosques de pinos, encinas, robledales, matorrales, cultivos, sotos de ribera, parques y jardines.
· Se conoce poco sobre su reproducción, la forma de aparearse y de encontrarse. Se sabe que copula generalmente entre abril y mayo. Pone un único huevo alargado de gran tamaño en los meses de junio-julio. La incubación dura entre 70 y 80 días.
· Debido a su carácter subterráneo es complicado saber el tamaño de sus poblaciones. El conocimiento de esta especie sigue siendo escaso en Aragón y en el resto de España. Es difícil detectarle y por tanto hacer una valoración sobre su abundancia o escasez en las áreas donde ha sido localizada la especie.
Hoy se sabe que falta en el toda la mitad norte de Aragón, y se han recogido observaciones puntuales en La Almunia, Ricla, Villanueva de Huerva, alrededores de Zaragoza ciudad, Santa Fe, Cuarte… y Gallocanta.
Aquí van algunas claves más sobre esta especie:
· Es una especie endémica de la Península Ibérica. Se distribuye por todo el centro y sur de España, estando completamente ausente en el norte y noreste peninsular. La provincia de Zaragoza y el sur de Navarra constituyen los límites más norteños para esta especie.
· La principal amenaza para este reptil parece provenir de la urbanización, que provoca la fragmentación de los hábitats donde se encuentra.
· A nivel de toda España, donde la especie cuenta con una mayor distribución, no parece tratarse de una especie seriamente amenazada. Sus hábitos subterráneos favorecen una mejor protección.
· Es una especie termófila que gusta de zonas cálidas con cierta humedad. Tiene hábitos subterráneos y elige suelos arenosos fácilmente excavables. Evita los terrenos con alta proporción de arcilla. Vive en ecosistemas mediterráneos compuestos por bosques de pinos, encinas, robledales, matorrales, cultivos, sotos de ribera, parques y jardines.
· Se conoce poco sobre su reproducción, la forma de aparearse y de encontrarse. Se sabe que copula generalmente entre abril y mayo. Pone un único huevo alargado de gran tamaño en los meses de junio-julio. La incubación dura entre 70 y 80 días.
· Debido a su carácter subterráneo es complicado saber el tamaño de sus poblaciones. El conocimiento de esta especie sigue siendo escaso en Aragón y en el resto de España. Es difícil detectarle y por tanto hacer una valoración sobre su abundancia o escasez en las áreas donde ha sido localizada la especie.
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