El Gobierno de Aragón ha declarado bajo la figura de protección de "Monumento Natural" al paisaje de los Órganos de Montoro, en Teruel. Son 188 hectáreas.
Este bello rincón de rocas de la comarca del Maestrazgo es una gran formación caliza de estratos subverticales de edad cretácica, una gran escultura natural cincelada por la erosión, y poblada por águilas, buitres y cabras monteses.
Con este nuevo espacio natural protegido ya van 16 áreas que componen "la lista grande" de la Red Natural de Aragón.
El Monumento Natural de los Órganos de Montoro abarca una superficie de 188 hectáreas, dentro de los términos municipales de Villarluengo y Ejulve, en la comarca de Maestrazgo. Constituyen un espacio de excepcionales valores naturales, culturales y paisajísticos. La zona se encuentra dentro del LIC “Muelas y estrechos del río Guadalope” y de la ZEPA “Río Guadalope-Maestrazgo”. Esta última incluye espectaculares cantiles que albergan poblaciones de rapaces rupícolas de gran interés, entre ellas el buitre leonado (Gyps fulvus) con una de las mayores poblaciones de la Península Ibérica.
La declaración como Monumento Natural de los Órganos de Montoro tiene por objeto asegurar la conservación de los valores paisajísticos en el entorno mediante una gestión adecuada; preservar la interacción entre la naturaleza y el hombre; proteger y conservar el hábitat de este espacio natural, especialmente, las especies que tengan algún grado de amenaza; y promover el desarrollo socioeconómico de los municipios de la zona de influencia socioeconómica, favoreciendo el uso racional y sostenible de los recursos naturales.
Tal y como se recoge en el decreto, se elaborará un plan de protección donde se establecerán los usos y actividades de carácter educativo, científico, recreativo, turístico, ganadero y agrícola con incidencia en el medio natural o cultural, haciendo compatibles las finalidades de protección y conservación con las de un adecuado desarrollo económico y social. Este plan también servirá para ordenar el uso público del espacio de forma que se satisfagan las necesidades de los visitantes sin poner en peligro la integridad ecológica y paisajística del espacio.
Excepcionales valores naturales
Desde el punto de vista geológico, los Órganos de Montoro son una gran formación caliza de estratos subverticales de edad cretácica. Las formas de relieve del Maestrazgo turolense son el resultado de una evolución geomorfológica determinada por la existencia de una superficie de erosión que ha sido posteriormente erosionada. En el entorno de los Órganos, el profundo encajamiento de la red fluvial sobre las rocas calizas ha compartimentado el relieve en múltiples unidades morfoestructurales. Estas unidades quedan limitadas por enérgicas cornisas y presentan cumbres macizas y aplanadas, que se sitúan entre los 1.500-1.800 m. El retoque más reciente de estas formas se debe a la karstificación general de las superficies calizas y a las acumulaciones de tipo periglaciar. El fuerte buzamiento de la formación es consecuencia de la intensa estructuración geológica del sector (pliegues y fallas).
En cuanto a la vegetación, domina la serie típica de las zonas de montaña media mediterránea con predominio de carrascas (Quercus ilex rotundifolia) y de matorrales esclerófilos entre los que destaca, por su presencia, la sabina negra (Juniperus phoenicia). En las paredes de roca de los Órganos de Montoro, la representación de superficie vegetal es limitada, restringida a grietas y fisuras, pero de alto valor ecológico por su carácter endémico. En el ámbito del Monumento Natural se pueden encontrar alguno de los ejemplares de flora catalogada aragonesa que, para los municipios de Ejulve y Villarluengo, recoge el Atlas de Flora de Aragón, del Instituto Pirenaico de Ecología y el Gobierno de Aragón (2005).
Por lo que se refiere a la fauna de los Órganos de Montoro, destaca, sin lugar a dudas, la presencia del buitre leonado y la cabra montés. Se trata de dos especies con fuerte presencia en la comarca de Maestrazgo.
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